domingo, 10 de abril de 2011

Yo soy así

¿Cuántas veces te has escuchado responder ante una propuesta que podría mejorar tu vida: “No puedo, YO SOY ASÍ”?
            Cuando decís eso estás manifestando que sos un ser completo, acabado y por ende sin ninguna posibilidad de transformación. Imaginate tratando de transmitir a alguien que no la está viendo, por ejemplo, el tamaño de una heladera: los brazos hacia delante, los dirigís hacia los costados y los bajás con impulso dibujando un rectángulo que no se puede extender. Estás limitando tus posibilidades de crecimiento.
            Lo que nos confunde en nuestro lenguaje, y por ende nos hace crear una realidad ficticia es intercambiar impunemente los verbos más elementales de nuestro idioma: SER Y ESTAR. Las personas NO SOMOS. Las personas ESTAMOS. Tenemos una esencia que nos hace únicos y diferentes pero ella está en POTENCIA (PODER) para ser lo que se quiera en el momento en que se necesite.
            ¿Qué es lo que nos hace tener esta conclusión tan determinante?
            Fundamentalmente las creencias.
Shu Fu-Tseu era un erudito escéptico que no creía en milagros.
Cuando murió su suegro y Shu lo velaba solitario, el ataúd se elevó lentamente hasta quedarse inmóvil en al aire. Shu se horrorizó y postrándose ante la caja gritó atropelladamente: "¡Venerable suegro, te ruego que no contradigas mis creencias!"
Dicho esto el ataúd bajó lentamente hasta depositarse en el suelo, con 
lo cual Shu recobró aliviado su escepticismo
            ¿Te parece exagerado? Pues, no lo es. Una creencia puede destruir tu vida.
 Triste época la nuestra. Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio o creencia. EINSTEIN
            Y como nadie puede evitar tener creencias, te sugiero que intentes elegir creencias que hagan importante lo que podés en vez de limitar tu potencial.
            Las CREENCIAS son sólo interpretaciones REGISTRADAS acerca de algo pero las vivimos desde la certidumbre.
            Desde el Coaching las creencias son sólo juicios, válidos para el que los emite porque vive en ellos pero de ninguna manera, verdaderos o falsos.
            La base de una creencia es una idea. La idea es como una mesa sin patas. Necesita referencias para apoyarse.
            Si vos decís: “Soy perseverante”, esas referencias serán las circunstancias en que no abandonaste lo que perseguías hasta conseguirlo, pero esto no hace que una creencia sea verdad porque habrá, seguramente, innumerables veces en que interrumpiste tu acción y no lo fuiste.
            No existe peligro en tener creencias sino en creer que son verdaderas porque esto te hace crear una realidad distorsionada.
            Repito entonces que de lo que se trata es de ELEGIR creer algo de vos mismo que te empodere y no algo que te limite.
Es la historia de dos vendedores de zapatos a quienes sus respectivas empresas enviaron a África para vender sus productos. Tan pronto como desembarcaron, el primer vendedor vio que todo el mundo iba descalzo y mandó un telegrama a su jefe: Vuelvo en el primer barco. Aquí nadie utiliza zapatos. Una semana más tarde llegó un segundo vendedor, el cual se encontró con la misma situación: sólo se veía gente descalza por las calles. Pero éste envió el siguiente telegrama a su empresa: Me quedo aquí. Perspectivas fabulosas. No tenemos competencia.

Vos… ¿Con qué vendedor te identificás?


¿Qué pasaría si en vez de la creencia: NO TENGO CONTROL SOBRE MI VIDA eligieras esta: SOY EL ARTÍFICE DE MI CAMINO?
¿Y con esta otra: VOS PORQUE TENÉS SUERTE, YO ME TENGO QUE ESFORZAR PARA TODO por LA SUERTE ES LA EXCUSA DE LOS FRACASADOS Y YO PUEDO TRANSFORMAR MI VIDA SI ME ATREVO?

            Dice Paul Scheele, presidente de la Learning Strategies Corporation (Corporación de estrategias de aprendizaje) que “no puedo” es “la fuerza de la negación más poderosa de la psique humana”.
            ¿Por qué el Coaching para este tema tan importante? Porque el Coaching actúa a partir desde creencias potenciadoras y por ende “su ojo que te facilita” dirigirá sus preguntas a que vos encuentres respuestas dentro tuyo con esa misma característica.
            Soy muy viejo para hacer eso.
            Nunca tendré dinero.
            Las matemáticas no son para mí.
            No puedo cambiar…quiero pero no puedo.
            ¿Yo…bailar?

            Por si durante la lectura has descubierto algunas de tus creencias limitantes y todavía no estás convencido de que cualquiera puede lo que quiera si realmente se lo propone, te dejo el siguiente link para que además de iluminarte, disfrutes.


Es posible creer en algo y no estar a la altura de tus creencias. Doctor House.

Con el placer de compartir. Rita       

No hay comentarios:

Publicar un comentario